domingo, 19 de octubre de 2008

Orient Express (VI)

Para finalizar el relato del viaje, viene la parte que más interesa a la prensa del corazón, es decir, la boda, la familia política y todo eso. Intentaré hacer una reconstrucción detallada de las miles de cosas que sucedieron en los pocos días que quedan de viaje, aunque las fotos están censored (yo no soy dueña de la imagen ajena!!)

El quinto día por la noche volamos a la ciudad de Jilin, en la provincia de Jilin (vaya, Jilin City xD) . La ciudad tiene 4 millones de habitantes y no es ni capital de provincia. Esto da una idea sobre la cantidad de chinos que hay xD. La llegada fue por la noche al aeropuerto de Changchung, que sí es la capital. De ahí a Jilín hay una hora o así en coche, nos recogió la familia política (!!!) y nos llevó a casa en unos cochazos que alcanzaban la velocidad de la luz en una carretera en la que además de mercedes, BMW y Audis, podíamos ver motos con tres personas (recordando los motoconchos de República Dominicana) y camiones llenos de paja a paso de tortuga. Una experiencia. Cabe comentar también la cantidad de luces de neón que hay por toooda la ciudad. Cualquier edificio respetable (hospitales, institutos) quedan decorados de tal manera que parecen clubs del alterne. Todo lo que no se invierte en iluminación 'normal' (farolas y demás) se invierte en neones que simulan gotas que caen de los árboles, luminosos que se encienden y se apagan dando una imagen más propia de Las Vegas que de una ciudad de provincia china.

Una vez en casa de la familia política, tuvo lugar la presentación y el intercambio de regalos. Nos regalaron unos colgantes de jade (!!!) que supuestamente tenían cada uno un símbolo. El mío era de una Urraca (?) y sí, tenía un sentido del que ahora mismo no me acuerdo pero que preguntaré en cuanto me acuerde. Bueno, la verdad es que no me acuerdo bien si era una urraca o una grulla, un pájaro en definitiva. Cenamos allí las famosas empanadillas caseras (no fritas sino cocidas). A mí me gustaron bastante, y la comida en general estaba rica (eso pensaba yo, otros familiares lo pasaron peor). Me encargué de animar la velada tirando una botella de sprite al suelo (de madera precioso, espero que no quedase marca xD). Y ya con esta cantidad de emociones nuevas en el cuerpo decidimos que el día ya había dado suficientemente de sí, así que nos retiramos al hotel para descansar.

El segundo día en Jilín amaneció lluvioso, cayendo una manta de agua increíble. A pesar de eso, fuimos a darnos un paseo porque, ¿cuando íbamos a volver allí en nuestra vida? Pudimos ver pocas cosas por el tiempo, el río Songhua, enorme, y una iglesia católica que quedaba un poco parche entre tanta cosa china. De todas maneras ellos se encargaron de darle su toquecillo chino, incluyendo un cartel con letras luminosas y además unos farolillos rojos ¡en la puerta de la iglesia!

La iglesia con la anciana venerable y milenaria (y encorvada).

Intentamos visitar aquello con entusiasmo pero las nubes estaban descargando toda su ira sobre nosotros, así que tuvimos que meternos en una cafetería. Cuando escampó (un poco) salimos de allí y las mujeres nos dirigimos al hotel porque iban a peinarnos allí para tener el pelo en condiciones. Increiblemente barato como siempre, lavar y peinar por 30 yuanes (3 euros) en un hotel de super lujo. Para acabar la noche, teníamos una cena con todos los amiguetes de los padres de la novia, así que nos guapeamos y aparecimos por allí dando la nota exótica (vaya tela) a una reunión en la que no faltaban los representantes de la milicia china (compañeros de la estancia del padre en el ejército) así como una tropa de primos/tíos/amigos que nos miraban y nos señalaban (con muy poca discreción también) cual si de un circo se tratase xD Incluso nos hacían fotos con el móvil! seguro que estamos en youtube!! xD

A una hora razonable decidimos retirarnos porque el día siguiente iba a ser de órdago!!

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Esas situaciones no se te olvidarán en la vida... ser el centro de todas las miradas, de esa cantidad de chinos, haciendo además fotos!! aggggg

Anónimo dijo...

No es lo mismo una grulla que una hurraca, un poco de respeto por las tradiciones ajenas. Si es una grulla, lo cual sería lo lógico, símboliza la salud y la larga vida y es un regalo preciado. En el antiguo Japón era un símbolo reservado únicamente para la familia real. No recuerdo nada relacionado con la hurraca pero estaría bien buscarlo por si acaso.

Zel dijo...

A ver, ya se que no es lo mismo!! Simplemente no me acuerdo, pero creo que era una urraca... por eso hay que mirar bien el significado jejeje

@Aldora, he de decir que nosotros tampoco nos quedamos cortos haciendo fotos así que... supongo que estamos en paz xD

superfluo dijo...

Yo no quiero insinuar nada, pero la urraca lo que simboliza es la afición de apropiarse de cosas ajenas...

Zel dijo...

Será apropiarse de anécdotas de otros? ah no! que eso lo hace otra gente... :PPPP

superfluo dijo...

Yo soy cola, tu pegamento.

Y soy hombre y me corresponde un número impar, chincha :P